Los músculos de las nubes
“Acabo de despertar mientras el sol está cada vez más bajo. Vuelvo a mis notas. Desde aquí arriba descubro más claramente aquello que decía Leonard Cohen: «Dibuja los músculos de las nubes.» Descubro que se ven mejor desde arriba, esta tarde, y pienso que muchas nubes, muchos momentos, pasan y se convierten, suceden. Los invento en mi recuerdo y se me aparecen rosa, de color rosa, los músculos de las nubes.
Desde aquí arriba, en medio del atardecer que me devuelve al otoño a través de la ventanilla, anoto un comentario curioso que debería hacerle a Juan sobre el color rosa que ha aparecido en sus cuadros, también en los papeles, con fuerza. Pensar en este color calmará mis exigencias, aunque resulta tranquilo y arriesgado a un tiempo. El rosa de los músculos de las nubes es el rosa de la falda de raso de aquel cuadro de Fragonard, el rosa de Lujo, calma y voluptuosidad de Matisse y el rosa chicle de los cuadros de Willem De Kooning, de sus Women y sus paisajes; es también el rosa de Philip Guston, el mismo rosa con el que Fontana hizo algo que me recordaba a una tabla de surf… ”
Fragmento del texto de Ricardo Forriols “Olivares Song” para el catálogo de la muestra individual en la Galería Pilara Parra 2005.